9 Septiembre 2012 17:00 | Skenderjia, Main Hall
Intervención de Mustafa Ceric en la Asamblea de inauguración
Eminencias,
Excelencias,
Hermanos y hermanas,
Queridos amigos,
Dobrdošli, أهلا و سهلا, Ahlan wa sahlan, Hoşgeldiniz y bienvenidos a Sarajevo, la ciudad de la paz, ciudad de muchas fes y culturas, la ciudad de muchas buenas personas, la ciudad de muchos recuerdos, la ciudad de muchos acontecimientos históricos. Este Encuentro Internacional por la Paz se recordará como uno de los acontecimientos más importantes de la historia reciente de Sarajevo.
Es, pues, un honor saludarles a todos en nombre de todas las personas de buena voluntad de Sarajevo y de Bosnia y Hercegovina.
Además, tengo el gusto de dar las gracias en nombre de todos ustedes, que han venido de todo el mundo, a la Comunidad de Sant'Egidio por su trabajo incansable de promoción de la paz en todo el mundo.
Un agradecimiento particular a la Comunidad de Sant’Egidio por haber elegido este año Sarajevo como ciudad mundial de la paz. Este año es el veinte aniversario del sitio a la ciudad. Once mil ciudadanos de Sarajevo de varias fes y nacionalidades, entre los que había 1.000 niños, fueron asesinados en cuatro años de sitio y bombardeos.
Aquellas víctimas inocentes de Sarajevo merecen nuestro respeto y sus familiares merecen nuestras condolencias. Pero más que eso, merecen nuestro sincero trabajo por la verdad, la justicia, la paz y la reconciliación, merecen nuestro juramento honesto a Dios y a la humanidad de que haremos todo lo posible para que nadie tenga que pasar jamás en ningún lugar lo que pasó aquí.
Señores Cardenales,
Excelencias,
Hermanos y hermanas,
Queridos amigos,
El hecho de que hayan venido a Sarajevo, que se considera la segunda Jerusalén del mundo y la primera Jerusalén de Europa, para celebrar la paz es el mejor regalo que se puede hacer a la paz mundial.
No debemos olvidar que 2014 se celebrarán los cien años de la Primera Guerra Mundial, que empezó aquí en Sarajevo. El acontecimiento histórico de hoy pone a la ciudad en la vanguardia de la decisión por la paz o por la guerra en el mundo. El encuentro internacional por la paz de este año es un mensaje claro al munco entero de que nosotros nos decantamos por la paz, y no por la guerra, por la seguridad, no por el terrorismo, que nuestro derecho es por la libertad y la dignidad, y que nuestros corazones y nuestras mentes están de acuerdo con esta oración sincera:
• Oh Señor, si pecamos, danos la fuerza del arrepentimiento de Adán.
• Si una desgracia nos afecta, enséñanos cómo construir el Arca de Noé.
• Si la desesperación nos ofusca, ilumínanos con la fe sincera de Abrahán.
• Si un tirano nos amenaza, haznos fuertes con la valentía de Moisés.
• Si nos ofrecen el odio, sálvanos con el amor de Jesús.
• Si nos echan de nuestras casas, fortifícanos con el deseo de volver de Mohamed.
• Oh Señor, te pedimos que unas nuestros corazones en la humanidad.
• Oh Señor, te pedimos que refuerces nuestros pasos hacia la verdad y la justicia.
• Oh Señor, te pedimos que unas nuestra voluntad hacia la paz y la seguridad.